Resumen: El patrimonio construido acumula la energía de los materiales y de la historia, por lo que es necesaria una lectura contemporánea para reinterpretar los edificios del pasado desde el presente, para que los lugares se conviertan en algo más que en paisajes de la memoria.
El artículo analiza el fenómeno reciente de la reutilización y recuperación de espacios industriales y su conversión en centros de arte, lo que está suponiendo una transformación tipológica del museo. Esta tendencia se debe al gran potencial arquitectónico y urbano que almacenan, que en su relación con la ciudad generan espacios urbanos, constituyendo un foco de atracción para expertos y visitantes.